A Santa Lucía se le ha representado frecuentemente con dos ojos, porque según una antigua tradición, a la santa le habrían arrancado los ojos por proclamar firmemente su fe. Nació y murió en Siracusa, ciudad de Italia, y gracias a sus múltiples virtudes entre las que se destaca la sencillez, la humildad y la honradez, el Papa San Gregorio en el siglo VI puso su nombre a dos conventos femeninos que él fundó. Según la tradición, cuando la santa era muy niña hizo a Dios el voto de permanecer siempre pura y virgen, pero cuando llegó a la juventud quiso su madre (que era viuda), casarla con un joven pagano. Lucía finalmente obtuvo el permiso de no casarse, pero el joven pretendiente, rechazado, dispuso como venganza acusarla ante el gobernador de que la santa era cristiana, religión que estaba totalmente prohibida en esos tiempos de persecución. Santa Lucía fue llamada a juicio; fue atormentada para obligarla a adorar a dioses paganos, pero ella se mantuvo firme en su fe, para luego ser decapitada. Comentario sobre la biografía Las personas que no aman a Dios y que no son católicas, por amor humano, pueden llegar a hacer muchos males e injusticias: calumniar, robar y acusar a otro… La rabia de los que no poseen a Dios por los sacramentos, con sus deseos y pasión, se hacen astutos ¡lobos sanguinarios! Pero Dios protege siempre a los santos, para que no lo dejen jamás, a pesar de toda la astucia de Satanás. Santa Lucía, mártir, fue conocedora de tan triste historia en su propia vida. Ella puede interceder por todos los que, como ella, no quieren casarse con paganos, por ser santos cristianos. Autor | P. Jesús © copyright - Santo del día a día
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Marco Antonio nació el 22 de mayo de 1801, en Mondoví, en la ilustre familia de los Durando, cuya casa daba a la Plaza Mayor y estaba cerca de la catedral y de la iglesia de la Misión. Al revés que su madre, que era persona muy piadosa y que inspiró la religiosidad y la fe en el corazón de sus ocho hijos, el padre tenía ideas liberales y era de tendencia laica y agnóstica. Dos de los hijos, de manera especial, profesaron tales convicciones y se implicaron en los sucesos del Risorgimento italiano. Ocuparon puestos de relieve en la vida política y militar. Santiago fue ministro de asuntos exteriores en el gobierno Rattazzi, de 1862. Juan, general y jefe de las tropas pontificias, en 1848, desobedeció las órdenes de Pío IX llevando a las tropas pontificias más allá del Po para cerrar el paso a los austríacos. Una vez que regresó al ejército piamontés, participó con Carlos Alberto en la batalla de Novara, en la expedición de Crimea y en las guerras de independencia. La pasión misionera. Marco Antonio salió más a la madre. A los 15 años manifestó el deseo de marchar como misionero a China. Entró en la Congregación de la Misión, que por entonces se estaba reconstruyendo en Italia. A los 18 años emitió los votos perpetuos y el 12 de junio de 1824 fue ordenado sacerdote. Durante cinco años permaneció en Casale Monferrato y después, desde 1829 hasta su muerte, en la casa de Turín, de la que fue superior dos años después de llegar. En lugar de ir a China, su destino fueron las misiones populares, en las que expresó la pasión misionera del anuncio de Cristo. Sostuvo y difundió la recién nacida obra de la Propagación de la Fe, instituida en Lyon en 1822. En la plenitud de su responsabilidad como Visitador, en 1855, inauguró el colegio Brignole-Sale para las misiones extranjeras con el objetivo de formar sacerdotes para las misiones ad gentes. En los años jóvenes de su primer sacerdocio, su dinamismo misionero fue absorbido por las misiones, que predicó en muchos pueblos del Piamonte. Huyendo de los extremismos, tanto del laxismo como del rigorismo jansenista, el padre Durando predicó la misericordia de Dios, atrayendo a las gentes a la conversión: «La gente —relata un cronista de la misión de Bra— se agolpaba para oírlo y estaba tan silenciosa y atenta oyéndolo como si fuese un único hombre». En estas misiones no se limitó a predicar, sino que allí donde encontraba situaciones graves de pobreza, de acuerdo con los cohermanos, actuaba de modo concreto. En Locana, por ejemplo, hizo «convertir todo el legado económico de la misión, que consistía en 700 liras, en harina de maíz para los pobres del pueblo», practicando así la enseñanza de San Vicente de actuar espiritual y corporalmente en favor de los pobres. Amor a los pobres y primer director de las Hijas de la Caridad en Italia La preocupación por los pobres fue la otra cara de su pasión misionera. Poco después de haber sido elegido superior, intuyó la utilidad de introducir en Italia del norte a las Hijas de la Caridad, nacidas del carisma caritativo de san Vicente y de santa Luisa de Marillac. Éstas, tras haber sido dispersadas en la época de la revolución francesa, habían comenzado a reorganizarse. Las apariciones de la Medalla Milagrosa, en 1830, a santa Catalina Labouré, novicia de las Hijas de la Caridad, pueden considerarse como el origen del nuevo florecimiento que estaba experimentando esta comunidad. La inteligencia del padre Durando consistió en intuirlo. Las quiso en Piamonte. El rey Carlos Alberto, en 1833, las acogió y ellas comenzaron a tomar la responsabilidad de varios hospitales, tanto los militares de Turín y Génova, como los civiles de Carignano, Castellamonte y Turín. En 1855, tuvo el valor de enviarlas a la retaguardia de la guerra de Crimea para curar a los heridos. Al mismo tiempo difundió la asociación mariana de la Medalla Milagrosa entre las jóvenes y de ella nacieron nuevas vocaciones: en el breve espacio de diez años, surgieron 20 fundaciones e ingresaron 260 hermanas. El número de las vocaciones era tan desbordante que Carlos Alberto puso a su disposición, en 1837, el convento de san Salvario, en Turín. Gracias al crecimiento de las hermanas, el padre Durando dotó a la ciudad de Turin de una red de centros de caridad, llamados Misericordias, desde las que las hermanas, con las Damas de la Caridad, salían para prestar el servicio a domicilio y la ayuda a los pobres. Alrededor de las Misericordias surgieron diferentes obras, como las primeras guarderías para niños pobres, talleres para muchachas y orfanatos. Las Hijas de la Caridad han sido extraordinarias impulsoras del desarrollo del catolicismo social en Italia gracias a su obra de asistencia entre los enfermos y los pobres, a la vez que con la asunción de variadas obras educativas. Hombre de gobierno y director de conciencias En 1837, con apenas 36 años, fue nombrado visitador (o superior mayor) de la Provincia del norte de Italia de los misioneros vicencianos, cargo que ocupó durante 43 años ininterrumpidos, hasta su muerte. Por ello, tuvo que mermar su participación en las misiones. Su tiempo estuvo absorbido por la organización de la congregación de los misioneros vicencianos y la predicación de ejercicios espirituales a los sacerdotes y clérigos de la diócesis de Turín. La calidad de su dirección espiritual atrajo también la atención de las nuevas fundaciones que estaban surgiendo en Turín. El arzobispo, monseñor Fransoni, le confió la dirección de las hermanas de san José, llegadas a Italia recientemente. Contribuyó a la redacción de las reglas de las hermanas de santa Ana. Fue guía espiritual de las clarisas capuchinas del nuevo monasterio de santa Clara. La marquesa de Barolo, que había fundado un monasterio para la recuperación de las muchachas perdidas, las hermanas penitentes de santa Magdalena, deseó que fuese consejero en la redacción de las reglas y director de la obra. Sin embargo, la obra que lo caracteriza es la fundación de las hermanas Nazarenas. En la escuela de Jesús crucificado, fundador de las Nazarenas Como sucede con las obras de Dios, sin haberlo querido, el 21 de noviembre de 1865, fiesta de la Presentación de María, el padre Durando pudo confiar a la sierva de Dios, Luisa Borgiotti, las primeras postulantes de la nueva Compañía de la Pasión de Jesús Nazareno. Eran jóvenes que se habían dirigido a él, puesto que, deseosas de consagrarse a Dios, carecían de algunos requisitos canónicos para poder entrar en las comunidades religiosas. Él les encomendó la tarea de servir a los que sufren, como miembros dolientes de Cristo crucificado, yendo a asistirles a su domicilio, día y noche. La obra era hasta tal punto novedosa y original que un canónigo de la catedral exclamó: «Si el padre Durando viniese a confesarse conmigo, en conciencia no me sentiría en grado de absolverlo». Y sin embargo, gracias a la caridad de estas hermanas, que supieron estar junto a los moribundos con delicadeza, discreción y fe, porque contemplaban en los que sufrían el sufrimiento del Señor, se produjeron algunas conversiones significativas como las de Guido Gozzano, Felice Raccagni, Sofia Graf y Anni Vivanti. Muerte y glorificación El padre Durando murió el 10 de diciembre de 1880: tenía 79 años. Sus restos mortales, significativamente, están sepultados en aquel pequeño santuario de la Pasión, anejo a la Iglesia de la Visitación de Turín, donde la comunidad de las Nazarenas se había nutrido de la devoción a la pasión del Señor para introducirse de forma misionera en el servicio de los que sufren. La causa de beatificación, iniciada en Turín en 1928 y continuada en Roma con el proceso apostólico en 1940, se ha concluido en el 2001 con el reconocimiento del milagro obtenido por su intercesión. Comentario sobre la biografía: Beato Marco Antonio Durando El Beato Marco Antonio Durando, misionero fiel en donde se hallase, propagaba la fe, y la fe de muchos fue conocida y aumentada por la Gracia que Dios infundía al Padre Durando. De buenas madres, de madres piadosas, nacen hijos santos, por la Gracia de Dios, y el ejemplo y oración de la madre que, unida a la Madre de Dios, consiguen de Dios maravillas para el mundo, tan necesitado de la Gracia. P. Jesús © copyright Fuente | Santo del día a día Quisiera compartir contigo un principio que te ayudara a alcanzar un máximo nivel de calidad en todo lo que emprendas y de esta manera construirás para ti un futuro poderoso.
Las empresas japonesas utilizan desde hace tiempo esta técnica para alcanzar sus metas empresariales y seguir superándose. Si estas familiarizado con la supremacía empresarial japonesa, tal vez te sorprenda saber que antes de la segunda guerra mundial, muchas de sus empresas estaban mal dirigidas, poseían prácticas de gestión ineficaces y también había una baja moral entre los empleados, pero luego de la guerra, las empresas se encontraban sin recursos y con un país devastado. Para superar estas graves limitaciones, los empresarios, en vez de abogar por cambios radicales e innovadores para producir los resultados esperados, les instaban a los supervisores a buscar los centenares de "pequeñas cosas" que eran necesarias modificar, e ir corrigiéndolas de a poco, no intentaban planear una remodelación completa de la plantilla de trabajadores, ni una renovación total del equipamiento, no había tiempo ni recursos para tareas de tal envergadura, buscaban mejorar en los trabajos que ya existían y conservaban el equipamiento actual. Como seguramente sabes, las compañías japonesas que se reconstruyeron bajo estos principios de mejoras pequeñas y constantes, pronto alcanzaron gran nivel de rendimiento, producción y calidad, transformándose así en un icono de excelencia. La clave está en «El poder de los pequeños esfuerzos...» «Pequeños esfuerzos realizados en forma constante producen grandes resultados» La clave del éxito en la vida es fijarse metas y luego luchar con todas nuestras fuerzas para poder alcanzarlas. Seguramente tienes metas que planeas alcanzar, a corto, mediano y largo plazo, metas a nivel económico, familiar, espiritual, personal, etc. Trazar metas es algo relativamente fácil, la parte más difícil se encuentra en la lucha diaria, cuando nos ponemos en acción y tratamos de concretarlas, es ahí donde muchos bajan sus brazos y se rinden sobrepasados ante los desafíos que tienen por delante. La idea de tener que hacer grandes cambios nos inmoviliza. Nos preguntamos "... ¿cómo hare para alcanzar mis objetivos, son demasiado altos, necesitaré hacer un gran esfuerzo, de donde sacare la energía necesaria para terminar y concretar mis sueños?, al no encontrar una respuesta favorable nos quedamos estancados, la mayor parte del tiempo, en la cómoda rutina. La clave para lograr un gran cambio está en llevar a cabo los pequeños, esto es algo que tiene que ver con la inercia (la tendencia de los cuerpos en reposo o en movimiento a mantener su estado). Si caes en la inactividad y esperas que los cambios se produzcan por si solos, a menos que haya algún tipo de intervención divina, las cosas seguirán de la misma manera, ya que no es posible quebrar la ley de la inercia, pero si haces un pequeño movimiento hacia tu objetivo, el impulso de ese primer paso te activara y pronto estarás haciendo cambios significativos. Miremos por un instante como trabaja también este principio en las cosas negativas de nuestra vida. ...un poco de levadura leuda toda la masa...1º Corintios 5:6 ...un poco de sueño, un poco de dormitar, y cruzar por un poco las manos para reposo, así vendrá tu necesidad como caminante y tu pobreza como hombre armado... Proverbios 6:10-11 En la primera referencia el problema radica en permitir que pequeñas ideas, conceptos o doctrinas erróneas tengan lugar en nuestros pensamientos, lo cual producirá con el paso del tiempo un crecimiento descontrolado de falsas apreciaciones. En el segundo ejemplo habla por sí mismo... Cuando un emprendimiento fracasa… un matrimonio se destruye... pensamos que la causa de dicho fracaso radica en un hecho puntual y especifico, sin embargo, la causa, muchas veces se debe a la suma de pequeños factores, al parecer sin importancia, pero que van empujando lentamente y lanzan a las personas hacia un abismo de fracaso y dolor. No subestimes el poder de las cosas pequeñas, tanto en lo negativo como en lo positivo.... Imagina que quieres ahorrar una cierta suma de dinero, o quieres escribir un libro, o tal vez, componer una canción, empezar una dieta, establecer una relación...este principio te puede ayudar. Pequeñas acciones, realizadas en forma continua, te ayudaran a alcanzar tus sueños. Alguien dijo que: ...
«Los grandes hombres de la historia, comenzaron con pequeños esfuerzos, pero por sobre todo con pequeños actos de amor, si te animas puedes hacer la gran diferencia» Mario Serrano Compartido por: Hector Emilio Ramon Pedernera Reflexiones para el alma de José Luis Prieto Historias de vida, pensamientos para enfrentar problemas, fortalecer el alma y el espíritu, un dulce maná de reflexiones para hacer de la realidad un sueño. 8 de Diciembre: Solemnidad de la Inmaculada Concepción de María
El 8 de diciembre de 1854 el Sumo Pontífice, Pío Nono, después de recibir numerosas peticiones de todos los obispos y fieles de todo el mundo se reunió en la Basílica de San Pedro en Roma y proclamó la fiesta de la Inmaculada Concepción. Había más de 200 prelados, cardenales, arzobispos, obispos, embajadores y miles y miles de fieles católicos, en medio de la emoción general declaró solemnemente: "Declaramos que la doctrina que dice que María fue concebida sin pecado original, es doctrina revelada por Dios y que a todos obliga a creerla como dogma de fe". Desde Roma cantidad de palomas mensajeras salieron en todas las direcciones llevando la gran noticia, y en los 400.000 templos católicos del mundo se celebraron grandes fiestas en honor de la Inmaculada Concepción de la Virgen María. Solemnidad de la Inmaculada Concepción de María Honrar a María, venerar a María, es dogma de fe, porque Ella, la Virgen María, es la Inmaculada Concepción. Que salgan de nuestro corazón, como palomas mensajeras en todas direcciones, todas nuestras acciones y voz, y declaren nuestro amor a la siempre Virgen Madre de Dios y Madre nuestra. Ella nos bendice y habla de nosotros a su Hijo, Dios, a su Esposo, Dios Espíritu Santo, a su Padre, Dios. Ninguna criatura es más grande que Ella; alabémosla, amémosla; pidámosle que su Gracia nos colme de Gracias de Dios. Ella puede, porque es la amada de Dios; Ella, María, la Inmaculada Concepción. Autor: P. Jesús © copyright Fuente | Santo del día a día Como cristianos nos unimos a los diez deseos del obispo de Querétaro (México), monseñor Mario de Gasperín para el año 2009:
1. La unión familiar. Incrementar la unión de la familia completa: papá, mamá, hijos y, si están los abuelitos, mejor. Evitar toda violencia familiar, los malos tratos y las palabras groseras. La familia que vive mejor es aquella donde hay respeto y reina el amor. 2. La fidelidad conyugal. Decir no al divorcio; no a los hijos fuera del matrimonio; no a las uniones libres; no a los niños sin papá. Todo esto significa decir “sí” a la vida y al amor. Amor es fidelidad para toda la vida. 3. Trabajo arduo. Ganarse el pan con el sudor de la frente. El dinero fácil se convierte en trampa; no da felicidad. Pagar el salario justo y evitar la corrupción. Una vida honesta, sin vicios, es siempre una buena inversión. 4. Ecología familiar. No desperdiciar el pan, el agua, la luz. No contaminar. Sembrar plantas y flores. La salud es siempre la riqueza mayor. 5. Ahorro y austeridad. No gastar más de lo que se gana. Evitar comprar fiado y pedir prestado. Todo abuso se paga. Vivir con austeridad es un arte y una virtud cristiana. 6. Alegría de vivir. Disfrutar de las maravillas de Dios: la vida, la luz, el aire, el sol, el campo, la familia, los amigos. Completar esta riqueza con la lectura de un buen libro, comenzando por la Biblia y el Catecismo. Aprender a escuchar y conversar en familia. Escuchar música seria, no ruido. La cultura es adorno del alma y fuente de felicidad. 7. Amor a la tierra. No tener tierra sin producir. Hacer en el patio de la casa el huerto familiar. También en macetas. Preferir los productos nacionales y de la región, a los importados. Apoyar siempre a los trabajadores del campo mexicano. 8. Confianza en Dios. Reconocer el poder de Dios y de su divina Providencia. Dios es defensor del pobre. Ser agradecidos. Asistir a Misa todos los domingos. Dar a Dios y al César lo que corresponde a cada uno: Cumplir con los diezmos y pagar los impuestos. 9. Oración en familia. Rezar juntos ante el altar familiar. El Rosario es lo mejor, y más si se añade una pequeña lectura de la Biblia. Repasar con los hijos los Diez mandamientos. 10. Ser solidario. No olvidar que hay siempre alguien más necesitado que nosotros. Tener algo para compartir y jamás negar el pan a quien padece necesidad. A la autoridad civil corresponde la justicia, la salud y la alimentación del pueblo; “pero no hay orden estatal, por más justo que sea, que haga superfluo el servicio del amor” (Deus caritas est, 28). Fuente | lafamilia.info Comentario del Evangelio
Lucas capítulo 2, versículos 22 al 40 Simeon es un personaje entrañable. Lo imaginamos casi siempre como un sacerdote anciano del Templo, pero nada de esto se nos dice en el texto. Simeon es un hombre bueno del pueblo que guarda en su corazon la esperanza de ver un dia «el consuelo» que tanto necesitan. «Impulsado por el Espiritu de Dios», sube al templo en el momento en que estan entrando Maria, Jose y su niño Jesus. El encuentro es conmovedor. Simeon reconoce en el niño que trae consigo aquella pareja pobre de judios piadosos al Salvador que lleva tantos años esperando. El hombre se siente feliz. En un gesto atrevido y maternal, «toma al niño en sus brazos» con amor y cariño grande. Bendice a Dios y bendice a los padres. Sin duda, el evangelista lo presenta como modelo. Asi hemos de acoger al Salvador. Pero, de pronto, se dirige a Maria y su rostro cambia. Sus palabras no presagian nada tranquilizador: «Una espada te traspasara el alma». Este niño que tiene en sus brazos sera una «bandera discutida»: fuente de conflictos y enfrentamientos. Jesus hara que «unos caigan y otros se levanten». Unos lo acogeran y su vida adquirira una dignidad nueva: su existencia se llenara de luz y de esperanza. Otros lo rechazaran y su vida se echara a perder. El rechazo a Jesus sera su ruina. Al tomar postura ante Jesus, «quedara clara la actitud de muchos corazones». El pondra al descubierto lo que hay en lo mas profundo de las personas. La acogida de este niño pide un cambio profundo. Jesus no viene a traer tranquilidad, sino a generar un proceso doloroso y conflictivo de conversion radical. Siempre es asi. Tambien hoy. Una Iglesia que tome en serio su conversion a Jesucristo, no sera nunca un espacio de tranquilidad sino de conflicto. No es posible una relacion mas vital con Jesus sin dar pasos hacia mayores niveles de verdad. Y esto es siempre doloroso para todos. Cuanto mas nos acerquemos a Jesus, mejor veremos nuestras incoherencias y desviaciones; lo que hay de verdad o de mentira en nuestro cristianismo; lo que hay de pecado en nuestros corazones y nuestras estructuras, en nuestras vidas y nuestras teologias. La familia es el lugar natural de la educación. Los lazos que se crean en ella son los más fuertes y profundos. Como lo afirmó varias veces el Papa Juan Pablo II, la persona dentro de la familia es “querida por sí misma”, “no está en función de nada ni de nadie”, “no es considerada desde el aspecto utilitario o del valor material”. La familia es como un observatorio a todas las distancias. El comportamiento en casa es el más verdadero, mientras que en el colegio, en la calle, con otras personas -a no ser que sean muy amigas- presentamos de algún modo una apariencia. Familia vs medios de comunicación
En la familia los padres enseñan y educan con su propia vida, con su personalidad y con su amor; transmiten virtudes y las “contagian”, a sus hijos. Sin embargo, la televisión y los demás medios de comunicación están tratando de contrarrestar el papel de la familia como educador primario. Según el autor Fernando Hurtado del portal almudi.org, por culpa de los medios audiovisuales buena parte de los chicos de hoy en día se expresa del mismo modo y con el mismo argot, viste con el mismo estilo, tiene principios de razonamiento idénticos, y una visión de la sexualidad, del matrimonio y de la religión similar a la que trasmiten los medios. De acuerdo al autor, “detrás de esta identidad de conducta en la que desaparece la creatividad personal en aras de la uniformidad, las mismas ideas llegan a todos, del mismo modo, sin aparato crítico. Lo bueno y lo malo se presenta “cocinado en la televisión”, y es digerido y asimilado por todos. Como no se presenta otra alternativa cultural, o se presenta descalificada, casi no cabe resistencia.”. Ante esta influencia apabulladora, la familia es la fuerza mediática para contrarrestar la influencia negativa de muchos programas televisivos. ¿Qué hacer ante esta situación? Descubrir todo el potencial humano que como padres tenemos, el cual está en cosas pequeñas y en cosas grandes:
Fuente | La Familia |
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El que no ama, no ha conocido a Dios; porque Dios es amor. Archivo
Febrero 2019
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